viernes, 28 de noviembre de 2014

El Fantasma

Seth Alvarez.

Era muy temprano, no había podido dormir bien y lo que descubrí esa mañana de abril, me marcaria hasta el fin de mis días.  Esa semana había sido intensa, una de las pruebas más difícil de mi corta vida. El ver a mi tía Amelia como se consumía con el maldito cáncer, nos cambió por completo. Ella había sido una mujer desdichada y solitaria; su tristeza, decían, se debía al suicidio de su novio, unos días antes de contraer matrimonio. Decían que mientras se probaba el vestido, el padre del novio, le avisó la tragedia. A partir de esa inusual experiencia, la tía Amelia estuvo acompañada de esa amargura que marcaría su rostro hasta la tumba. Aunque para mí, debo decirlo, siempre hubo una pequeña sonrisa en sus labios, siempre me ayudo dándome ánimos y en todo momento me ofreció todo lo que estaba en sus manos, para hacerme sentir protegida. Y ahora estábamos ahí, en su sepelio, llorando su partida. Pero no todos pensaban como yo; el tío Ramiro decía que la tía era una ladrona que había obligado al abuelo a quitarles la casa grande. La tía Lorena, decía que siempre había sido una cualquiera y mi padre, que hacía mucho que había muerto, siempre argumentó que la tía Amelia, estaba loca, porque la mujer juraba y perjuraba que en varias ocasiones había visto, merodeando la casa, un fantasma. El evento era parco y con pocas lágrimas. Solo los familiares más cercanos nos acompañaban. El sacerdote era un hombre calvo y con cara de buitre. Me miraba a cada rato y me hacía sentir extraña. De repente, todo el sepelio se volvió monótono y el Padre prefirió apurarse. Habló un poco con el tío Ramiro y después se retiró, no sin antes echar una plegaria que nadie pudo entender. Entonces me quede sola con mis familiares y decidí dedicarle una oración de despida a la tía Amelia. En eso estaba, cuando un hombre viejo, de la edad de mis tíos, apareció de la nada y se acercó a la tumba. Arrodillado, lloró un rato ante la sorpresa del tío Ramiro, quien lo estudiaba escrupulosamente. De un momento a otro, el tío cambio su rostro, se tornó agresivo, gritó miles de insultos e inmediatamente lo corrió del cementerio. La tía Lorena al reconocer al personaje, asustada, se persigno y cayó desmayada. El hombre me miró con lágrimas en los ojos y se retiró cabizbajo. Cuando despertó la tía, gritó que había visto un fantasma. Rápidamente el tío Ramiro contestó que ese no era un fantasma, que en realidad era un malnacido y recalcó, que los fantasmas no envejecen. 


El Noticiero 26-10-14

martes, 25 de noviembre de 2014

Entrevista a Abraham Escobedo

por SETH ÁLVAREZ
fotografía PABLO ÁLVAREZ

Abraham Escobedo Salas es un joven director y guionista Zacatecano, residente en Guadalajara y que pertenece a la nueva generación del medio cinematográfico. Tuvimos una pequeña charla, donde nos platicó sobre su nominación del Ariel, sus inicios y sus proyectos futuros.

Desde la última vez que nos vimos en el festival Zanate del año pasado, donde recibiste el primer lugar como documental universitario, han pasado muchas cosas con tu documental B-boy ¿Qué nos puedes decir?
 Pues creo que Zanate fue un cierre de esa racha increíble de pisar festival y ganar. El documental se exhibió en otros festivales y espacios como en Toronto o en el FICUNAM, pero recibir la noticia de la nominación del Ariel, esa fue una gran noticia, fue como la graduación del docu.

Si, te ha ido muy bien con B-boy, pero déjame preguntarte por tus inicios, ¿Cómo empieza tu interés por lo audiovisual?
 Creo que es un interés que ha ido creciendo, a partir de otras actividades artísticas que hacía por hobbie. Cuando no estaba jugando fútbol, dibujaba, entonces vino la pintura, luego la fotografía; una cosa me llevó a la otra.

Pero, ¿Tenías definido el cine?
 No, pero curiosamente en la secundaria me junté con unos amigos y quería hacer una película de terror, nunca pensé en esto como una carrera, sólo sabía que quería hacer una película. No sabía cómo pero experimente el rol de director por primera vez con una cámara prestada y un guión de dos hojas escritas con lápiz.

Entonces ¿Cuándo te decides formalmente por esta carrera?
 Formalmente lo pensé cuando estaba en la prepa, en cuarto semestre. Es cuando te empiezan a preguntar en la escuela y en tu casa ¿qué quieres hacer de tu vida? Yo quería ser futbolista, así que nunca había pensado en otra cosa.

¿Y tu familia te apoyó?
 Fue difícil porque nadie en mi familia o alguien cercano se dedica al arte, entonces no es tan fácil que acepten la idea. Mis papás pensaban que yo iba a estudiar Arquitectura, pero las matemáticas y la física no se me daba mucho, entonces yo no lo consideré una opción.

Tú eres de Zacatecas, ¿Qué haces en Guadalajara?
 No existe carrera de cine en Zacatecas, para estudiar cine hay que salir a las ciudades grandes.

¿Hiciste la carrera de cine?
 Sí, en la Universidad de Guadalajara.

Entonces ¿Cuál es tu fuerte: el guión, dirección, producción…?
 Yo quiero dirigir. Y como Coppola le dijo alguna vez a George Lucas, "si quieres dirigir, tienes que aprender a escribir" me gustaría hacer las dos cosas.

¿Ficción o seguir con el documental?
 Quiero hacer cine. No importa el género. Depende de mi interés en ese momento. Aunque creo que se resume un poco a... cuando tenga dinero para producir ficción lo haré, cuando no, haré documental.

¿Cuáles son tus referentes artísticos?
 Vengo más de una generación que creció con animé japonés, sobre todo de series de televisión. Ya con el tiempo fui descubriendo maestros del cine, del arte, de la foto.

Tú que te vas más por la dirección, ¿Quiénes son los directores que te han influido?
No sé si han influido de una manera que se note en mi trabajo, pero me gusta el trabajo de Fernando de Fuentes, José Padilla, Park Chan-Wook y Coppola.

Y ¿Documentalistas mexicanos?
 Everardo González.

¿Cuál es el último documental que viste y que recomiendes?
 Creo que el trabajo que realizaron en THE CRASH REEL es impresionante, entretenido, fuerte.

Sabes cual documental me latió mucho, Sugar Man.
 Justamente lo vi ayer por tercera vez, muy chido, las buenas historias siempre son buenas para repetir.

Y ¿Mexicano?
 Quebranto, El Alcalde; aunque mi favorito: “Los que se quedan”, ese siempre se tiene que recomendar.

Dentro del trabajo que realizas ¿Qué es lo que más disfrutas?
 Aprender de todo y de todos. Soy como un niño curioso y este trabajo te permite eso, explorar el mundo exterior e interior del ser humano.

¿Para qué sirve el cine? ¿Cuál es tu opinión?
 Es difícil definirlo, para mí el cine sirve para maravillarnos o aterrarnos del mundo, contar nuestras experiencias y hacerlas colectivas. Al momento, podría decir eso, es una invitación a vivir otras vidas.

Y buscar respuestas, reflexionar…
 Claro, quién sabe si encuentres respuestas, pero por lo menos estas escarbando para encontrarlas.

Hablando de hacer documental, para platicar de algo en específico, ¿Cómo es tu proceso creativo?
 Eso si no lo puedo definir, quizás cuando tenga más producciones terminadas podré tener un mapa sobre mi forma de trabajo, por ahora lo sigo descubriendo.

¿Con quién te gustaría trabajar en México?
 Con quien se deje (ríe)

¿Hay algún director zacatecano?
 Iván Ávila Dueñas.

Y con él, ¿No? de paisano a paisano
 Pues me gustaría aprender de él, pero por ahora no se ha dado la oportunidad.

Algún libro que te gustaría adaptar al cine
 Me gustaría adaptar algunos cuentos de Rulfo, ya escribí la adaptación de uno, pero quién sabe si llegué a tener los permisos algún día. De los contemporáneos, me gustaría adaptar algo de Villoro.

¿Como ves el cine mexicano actual?
 Creo que el año pasado fue estupendo para las producciones nacionales, pero aún sigo pensando que los apoyos no se distribuyen como deberían.

¿Cómo te ves en un futuro, donde te gustaría llegar?
 Ya veremos a donde me lleva mi trabajo, lo importante para mí es conseguir los apoyos para seguir produciendo cine.

¿Tus próximos proyectos?
 Estoy finalizando mi tesis de ficción que se llama "El Barbero" y tengo otro proyecto documental que espero poder finalizar el próximo año.

Ya por ultimo háblame un poco más de B-boy.
 El proyecto nace de la fascinación que tengo, primero por el baile, en especial por el breakin' que es como el fuego, siempre fluyendo, siempre cambiante, con mucho poder.

¿Ya conocías al protagonista?
 No, pero todo fue muy orgánico, fue más el inicio de una amistad que una investigación, tanto así que me reúno con ellos cada que puedo.

¿Tenías idea a donde te llevaría este proyecto?
 No, y eso es lo maravilloso del documental, muchas veces tú también te vas sorprendiendo con lo que sucede en el camino; ganó 2 premios y 4 menciones, mención en Morelia y en Short Shorts. En este último me dio mucho gusto porque entre el jurado estaba Everardo González, que es un gran ejemplo para mí. Todos estos premios te dan energía para seguir trabajando con más fuerza.

Pues, mucho éxito y mucho cine. Gracias Abraham.

Taller de guion para principiantes